Tiempo de lectura: 4 minutosEl miedo nos ayuda a estar despiertos. Sin embargo, en ocasiones este puede sobrepasarnos y tomar el control de nuestros propios pensamientos. Incluso puede afectar a la forma en la que vivimos nuestro día a día. Este es el caso de la ansiedad y la hipocondría.
Hoy en Psicología Nafría trataremos cuál es la relación entre la ansiedad y la hipocondría. Es importante que conozcamos nuestra mente y emociones para poder comprender así lo que nos está ocurriendo y comenzar así un tratamiento de la ansiedad.
Cada una por sus propias causas, ambas enfermedades están estrechamente relacionadas con el miedo, a veces incluso irracional. Además, la ansiedad y la hipocondría también se relacionan en gran medida la una con la otra.
En mi consulta puedes encontrar la ayuda que necesitas para poder trabajar en ti y en poder hacer que te sientas mejor. Si sientes que algo no está bien o tienes demasiado miedo, no dudes en ponerte en contacto conmigo.
¿Qué es la hipocondría?
Tanto la ansiedad como la hipocondría son dos enfermedades muy generalizadas pero que, a su vez, no se suelen ver como enfermedades reales. Sin embargo, ambas pueden afectar en gran medida tanto a la salud mental así como física de una persona, causando perfectamente síntomas físicos como dolor de cabeza o de estómago.
→ ¿Cuáles son los síntomas de la ansiedad?
La hipocondría es ese miedo o preocupación por desarrollar cierta enfermedad o por padecerla. Las personas con hipocondría reinterpretan signos o señales de su cuerpo como síntomas de una enfermedad y esto puede llegar incluso a provocarla.
Determinar dónde se origina es difícil, pero puede tener tanto causas genéticas así como sociales. Si el sujeto crece en un ambiente donde las enfermedades tienen una gran relevancia y se muestra una gran preocupación hacia ellas, es posible que esa persona desarrolle hipocondría.
Ansiedad e hipocondría: ¿qué las causa? ¿Cómo se relacionan?

La ansiedad y la hipocondría se han entendido en ocasiones como un mismo problema e incluso se ve la hipocondría como una vertiente de la ansiedad. Por otro lado, la hipocondría puede ser una causa de la ansiedad y viceversa.
Es por esto que es tan complicado para los profesionales de la psicología determinar un origen general para la hipocondría. Esta podría ser un síntoma de ansiedad generalizada o venir provocada por un contexto social, como he indicado anteriormente.
Cada persona que acude a mi consulta viene con un bagaje emocional y una historia distinta. No todas las personas que tienen ansiedad desarrollan hipocondría. Es por esto que debemos conocer bien a la persona que estamos tratando para poder elaborar un tratamiento adecuado que se ajuste a sus necesidades y forma de ser.
→ ¿Qué es la ansiedad anticipatoria? Síntomas y causas
La hipocondría como causa de la ansiedad
La hipocondría sí es una causa para sentir ansiedad. Las personas con hipocondría suelen sentirse muy incomprendidas y solas. Van de profesional en profesional buscando una solución para su preocupación y cuando reciben la típica respuesta “todo es psicológico” se pueden llegar a sentir muy frustrados.
A esta frustración se le suma la propia ansiedad que les produce ese síntoma que les preocupa y al que no pueden encontrar solución o explicación. Al final desarrollan una mezcla de sentimientos de angustia y miedo que acaban por convertirse en una gran ansiedad.
Ansiedad e hipocondría: el miedo a ponernos enfermos
La ansiedad está relacionada en algunas personas con un fuerte miedo a la muerte. Ese temor por el fin de la vida es algo normal en el ser humano y también lo que la dota de valor. Es normal tener miedo a morir o pensar en qué es lo que ocurre después.
Sin embargo, algunas personas con ansiedad desarrollan síntomas como la hipocondría causados especialmente por ese miedo. Temen que un lunar se vuelva en cáncer o que puedan desarrollar alguna enfermedad que ponga en peligro su salud.
Esta es una de las formas en las que la ansiedad y la hipocondría pueden estar relacionadas, pero como has podido comprobar, puede producirse también a la inversa.
→ ¿Cómo se relacionan la ansiedad y los mareos?
El viaje hacia una solución: el problema de la hipocondría y la ansiedad

La hipocondría supone un problema para los profesionales de la sanidad puesto que en ocasiones no cuentan con las herramientas psicológicas adecuadas para abordar el problema. Una persona con hipocondría irá vagando de un lugar a otro buscando alguien que confirme su preocupación.
Para alguien con hipocondría, el dolor que sienten es real y la preocupación llega incluso a afectarlos de forma sintomatológica. Se entra en un círculo del que a veces parece imposible salir, con nuevos síntomas y nuevas preocupaciones sin respuesta.
El tratamiento para la hipocondría y la ansiedad
¿Cómo podemos solucionarlo? ¿Cómo hacer que la hipocondría desaparezca? Esto, como he comentado anteriormente, es un reto.
¿No sería mejor, entonces, que un sanitario confirme sus sospechas para que esa persona esté tranquila? No, en ese caso solo conseguiremos alimentar más el problema. El origen se encuentra en su mente y por ello se debe tratar desde la psicología.
El alivio que sentirá esa persona cuando confirmen lo que le preocupaba le mostrará que, gracias a que se ha preocupado y ha insistido, ha logrado salvarse y evitar la enfermedad. Esto será el aliciente que necesite para la próxima vez, en la que pensará “si esta vez tuve razón, ahora también la tendré”.
¿Cuál es la mejor forma de aliviar o tratar la hipocondría?
El mejor tratamiento para la hipocondría o para la ansiedad es a través de la ayuda de un experto. Alguien que te guíe y te tome de la mano en el camino y te haga ver que no estás luchando por tu cuenta, sino que hay alguien dispuesto a hablar con tus monstruos.
Desde mi consulta, Psicología Nafría, quiero poner todo lo que esté en mi mano para ayudarte y que puedas volver a ser la persona que eres (o quizás una versión incluso más fuerte y mejorada). Juntos encontraremos las herramientas que necesitas para hacerle frente a todo lo que estás sintiendo.
Pide cita y comencemos a trabajar en ti.